por pinto » 01 Mar 2011 12:44
Creo que somos muchos y muchas las que vamos a a apoyar las candidaturas de USTEA -no hay otra alternativa en el paronama para la gente con sentido de clase-. El escollo está en lo que ya se ha planteado en este foro, creo que por parte de Rivero, en si USTEA será capaz de presentar candidaturas en todos los ámbitos de preavisos que se presenten. Mi opinión es que el descontento, la desconfianza y el hartazgo de abusos a que se ha visto sometida y acumulando la gente es descomunal, tanto entre funcionarios como entre laborales, yo estoy en un centro y vengo de otros muchos y lo palpo a diario. La cuestión es que el terreno está muy trillado, en los 25 años de administración andaluza los territorios y lealtades están establecidas, hay una dinámica institucional, una adaptación al sistema por parte de la gente que va a ser muy difícil de vencer -aquí se dieron cuenta, aunque tarde, tanto UGT como CCOO, de que de proseguir la redacción del Decreto 5/2010 podría haber una quiebra importante en el sistema institucionalizado, en la tolerancia de la gente hacia sus prácticas, de que podía ser su sentencia final-. No obstante, mi percepción es que entre funcionarios y funcionarias la cosa va a ir peor para UGT y CCOO en favor de organizaciones como CSIF y SAFJA; entre laborales, sin embargo, esa institucionalización es mucho más fuerte y estos laborales, que durante años han formado parte de candidaturas de UGT y CCOO -incluso CSIF- o que de manera más discreta, sin estar en candidaturas, han ido a votarlos, por diversas razones que todos sabemos, muchos de ellos, no desean formar parte de esas candidaturas, ni desean votarlos, pero tampoco quieren significarse abiertamente en contra de ellos apoyando otras o formando parte de otras candidaturas; es un efecto entre miedo, instinto de conservación, un respeto coacctivo a nivel de comportamientos -que no en sus fueros internos- a las instituciones del sistema (PSOE, UGT, CCOO), lo que denota la acción subterránea de un sistema de limitación de libertades -de acción, de expresión, etc, ¿grave, verdad, para una democracia? y de lo que deberían tomar nota el PSOE y sus cancerberos- por temor a represalias que perjudiquen sus espectativas profesionales -de promoción, de traslado, de acceso, de atención a sus derechos ante futuros escenarios de expedientes de regulación de empleo, incluso y sobre todo de respeto a sus derechos y status profesionales y personales con la llegada de las agencias y los "caballos de troya" que han introducido en las administraciones con la integración del personal de los entes, instituciones, fundaciones, etc-. A lo mejor debería haberme guardado esta reflexión; pero creo que es mejor hacerla aun a riesgo de estar equivocado -ójala lo esté-; pero creo que debemos conocer lo que hay y comprender que ahora debemos estar unidos, más unidos que núnca, pues la reordenación del sector solo es un síntoma más de una enfermedad mucho más grave, de lo que se avecina en el futuro para nuestras jubilaciones, para nuestra tercera edad, para nuestros hijos; si esto es lo que hace la izquierda en nombre de la izquierda, qué no hará la derecha ..., por eso hay que superar el miedo, las reservas, las diferencias y apostar por unir fuerzas a la izquierda de esta izquierda devaluada; desde mi perspectiva creo que debemos empezar a reconstruir lo destruido ladrillo a ladrillo, debemos contar con toda la gente, con los que vienen de ninguna parte, pero también con los que venimos de otras guerras, de la UGT, de CCOO, de los despistados de la CSIF -porque todo está muy trillado-; al fin y al cabo las organizaciones, las instituciones, sirven a unos fines y dejan de ser útiles o necesarias cuando cambian esos fines, por qué no han de cambiar sus miembros los instrumentos, las organizaciones cuando estas traicionan los principios, las ideas, las esperanzas y los fines que perseguían cuando se unieron a ellas. Si no, apaga y vámonos. Otra cuestión es si USTEA representa o no el ideal del sindicalismo de clase que necesitamos en nuestro país, si puede confluir con otras organizaciones en esa defensa para foralecer la acción de clase, o si es un proyecto tocado en su origen por la misma enfermedad que tocó a CCOO y UGT -primero cedieron en los principios y luego lo han hecho tambien en las formas-. Desde el anonimato hago esta reflexión pública, porque creo que muchos y muchas deben verse reflejados en mi experiencia y por que quiero animar el debate sobre la necesidad de envalentonarnos y de cambiar las cosas, de ver si USTEA realmente merece la pena -aunque perdamos en el intento- por nuestra dignidad, la de defender nuestros derechos y los de los que vengan después, sin concesiones, sin prejuicios. Saludos.